El colombiano todavia tiene contrato por una temporada mas con el Deportivo Alavés, pero no cuenta para el proyecto del Alavés y le buscan salida desde hace semanas.

Desde hace algunos días ya ni entrena con el resto de compañeros. Desde la LFP han obligado a el Alavés a mantenerle el dorsal de la temporada pasada.

«Recuerdo que cuando lo compramos, le despidieron 65.000 personas en el estadio de Medellín. Todos estábamos convencidos de que había sido un acierto pero, nada más llegar, se encontró con un extraterrestre en su puesto como Marcos Llorente. El año pasado lo cedimos al Albacete y este año nos han preguntado por él todos los equipos de Segunda», ha comentado el director deportivo del club, Sergio Fernández.

El Albacete tenía una opción de compra si lograba su ascenso a la Liga Santander, pero no lo consiguió. El sueldo de Dani es de unos 800.000 euros, cifra prohibitiva para la mayoría de los clubes de Segunda. El Real Oviedo está cerca de cerrar su incorporación (parece que ofrece unos 500.000) pero el cafetero tendría que acceder a bajarse el salario. También hay que abonar una cantidad al Alavés ya que Torres tiene contrato en vigor.

El club vitoriano está necesitado de vender o ceder cuanto antes para liberar masa salarial. Ahora mismo no puede hacer ninguna operación y le cuesta ir con fuerza al mercado para conseguir a jugadores como Embarba (Rayo) o Calleri (Maldonado). El primero apunta a un club italiano y el segundo al Espanyol, próximo rival de los vitorianos este domingo en Liga Santander.