Según publica As:
Decía el presidente del Alavés, Alfonso Fernández de Trocóniz, que el problema para que Abdul Majeed Waris no llegara a Vitoria no estaba vinculado al límite salarial. Pero lo cierto es que si el Alavés hubiera dado salida a Dani Torres rumbo al Depor, habría dispuesto del dinero necesario para que la operación cristalizara.
En Coruña se quería a Torres. También en Oviedo y en Albacete. Y en bastantes clubes más pero lo cierto es que el conjunto que ofreció más dinero el día 2 de septiembre fue el Depor. Estaba dispuesto a pagar 400.000 euros del sueldo de colombiano. Pero Torres cobra 800.000 y le instó al Alavés a que se hiciera cargo de la diferencia. Y los vitorianos se negaron.
«Clamé a Dios por una nueva oportunidad… y él me la ha dado. Seguimos en la familia del Glorioso», comentó en su perfil de twitter en las redes sociales. «Dios fiel, bendito Glorioso», completaba su mensaje. Tuvo muchas críticas por ello con respuestas bastante irrespetuosas que no vienen a cuento.
Lo cierto es que Waris llegó a Vitoria con su agente el lunes por la mañana. Al mediodía pasó el reconocimiento médico en el centro asegurador oficial del club. A media tarde firmó un compromiso y, a medianoche, se percató de que su incorporación no era posible. El Oporto, que lo iba a ceder, también se mostró extrañado por el desenlace del caso.
El Alavés quería colocar a Torres o a Guidetti. O, mejor, a los dos. Al no ser factible, tuvo que dar salidas a futbolistas que apenas dejaban dinero en la caja como Nando, Verdon, Saúl o Demirovic. De hecho, la marcha de este último puede ser lamentada ya que Asier Garitano se queda ahora sólo con tres delanteros natos: Lucas Pérez, Joselu Mato y John Guidetti, un hombre con el que no se contaba.