Lucas Pérez se encuentra en un muy buen momento. Lleva once goles y es goleador nacional con más acierto. Parece que nadie se acuerda de Munir o de Calleri, dos jugadores que fueron la referencia del ataque del Alavés en las ultimas temporadas. El único que le sigue el ritmo es su compañero y amigo Joselu Mato.

«El empate en Leganés es bueno pero al ponernos por delante en el minuto 2 de la segunda parte, nos fuimos con un sabor un poco agridulce. Creo que es un gran punto que nos acerca al objetivo de la permanencia», aseguró el delantero del Alavés.

En referencia a el próximo partido frente a el valencia dijo lo siguiente: «Ante nuestra gente intentaremos ganar. En Mendi estamos haciendo una buena temporada y ahora empezamos a sumar fuera más que en la primera vuelta».

La afición albiazul ha estado muy nerviosa en las últimas semanas ya que Lucas sonó como sustituto de Dembélé para el Barcelona. Haber perdido al delantero gallego habría sido una buena operación económica (15 millones de euros) pero el equipo de Garitano habría perdido mucho filo.

Lucas asegura que, además del Barça, pudo salir a otros equipos que habían preguntado por él pero su decisión era la de seguir en el Alavés. De cara al mercado veraniego pueden ocurrir muchas cosas pero, en enero, su planteamiento era el de seguir en Vitoria y centrarse en la labor que inició allá por el mes de julio pasado cuando regresó a La Liga para unirse a el Alavés.

No seria de extrañar que varios equipos vuelvan a preguntar por el a final de temporada, aunque tiene contrato hasta el verano de 2022. La clausula de rescisión podría tener su peligro, no es demasiado alta y equipos de cierto nivel económico no tendrían problema en pagarla. Aunque hay que indicar que en septiembre cumpliría 32 años, con lo que algunos equipos podrían descartarlo por la edad.